Imagen CC: A mother is a complete woman | greekadman
Recientemente veíamos anunciada en varios medios de comunicación la publicación de un libro sobre estimulación de la inteligencia en niños en edad escolar. El libro ‘Todos los niños pueden ser Einstein’ del profesor de educación secundaria, Fernando Alberca, defiende que el éxito escolar de un niño está en manos de sus padres, principalmente, y también de sus profesores, en el 100 por cien de los casos.
Las malas calificaciones o el poco rendimiento académico de un niño, son una consecuencia en vez de una causa y, generalmente, están relacionadas con la baja autoestima o el deseo de llamar la atención por un problema emocional. Y en ambos casos debemos comenzar a solucionar el problema por la motivación. (…) Es muy importante alabar a nuestro hijo cinco veces por cada reproche que le hagamos.
De hecho, está demostrado que los niños que crecen en ambientes con carencia afectiva o que no juegan a menudo presentan un desarrollo neuronal entre un 20% y un 30% menor que el resto de los niños de su misma edad.
El profesor Alberca cree que hay muchos menos superdotados de los que creemos, lo que hay son inteligencias bien aprovechadas, dice. Defiende que los niños son capaces de todo si encuentran el método y la motivación adecuadas ya que no aprendemos porque seamos listos sino que nos hacemos listos conforme vamos aprendiendo.
Y en este sentido dirige otra de sus teorías según la cual no es cierto que sea en la más tierna infancia cuando más capacidad de aprendizaje tenemos: Cuando un niño es muy pequeño, son su curiosidad y la inquietud propia de la edad lo que le lleva a aprender, pero es de mayores cuando tenemos más técnica y motivación para aprender y desarrollarnos.
Cierto o no, nos parece que sus métodos de motivación para escolares pueden ser muy válidos y con ellos se pueden conseguir grandes resultados porque la autoestima y la seguridad de los niños lo son todo para desarrollar sus capacidades, y los padres tienen mucho que ver con ello.
